jueves, 21 de octubre de 2010

Asesinato de Alma, Crimen Contra la Humanidad

http://blogs.marianistas.org/category/justicia-y-paz/


Existen crímenes impunes por lo comunes, sutiles que son. Ocurren en el interior del cuerpo humano, generando internamente lo que otros humanos sufren en forma física: miseria, humillación, hambre, peligro de muerte. Esta forma de actuar está socializada, incrustada en el colectivo occidental tal cual la hambruna y la guerra provocada. Es más nimia, más sutil, y personal: incluso dentro de un mismo ser humano, esta injusticia se da. Aquí todo se divide en partes desiguales, unas se quedan con los derechos, la otra con las responsabilidades, unas hacen el trabajo y otras se quedan con las ganancias y méritos. Unos viven para ser felices, otros para matarse trabajando en hacer felices a los demás.

Esta actitud se relaciona con el valor con el que se percibe a si mismo y al otro. Cuando alguien piensa, o siente, que el otro no tiene valor, ni siquiera se preocupa por lo que le pueda pasar. Esta actitud inconsciente hace que la gente más mediocre, más estúpida, sea quienes se queden con los privilegios, mientras la más sensible o consciente se queda con el trabajo. ¿ Y porqué ocurre así? Porque la gente consciente percibe, o sabe, que tiene responsabilidad, que es parte de algo y que le corresponde ayudar. En cambio la gente mediocre no percibe su responsabilidad. Ellos solamente perciben su propio placer sin considerar de dónde viene, incluso poniendo fuertes mecanismos de defensa contra esta comprensión, ¿porqué? porque si se enteraran, si adquirieran consciencia, tendrían que trabajar, tendrían que dejar sus pañales y comenzar a tomar su responsabilidad.

Los más "conscientes" no la tienen nada fácil. Ellos sufren de un robo de consciencia y de robo del poder, son sometidos a constantes ataques y agresiones que tienen el objetivo de someterlos: una vez que han reconocido su disposición a ayudar, son agredidos, aislados, rebajados, humillados y usados de todos los modos posibles, quedando esclavizados a un estúpido sin escrúpulos cuya gran característica es la fuerza vital, fuerza que entre otras cosas, como un vampiro, también toma de aquel a quien sometió.

Comúnmente se dice que la gente no quiere ser libre, sin embargo, eso no es cierto: la libertad sólo se puede elegir valga la redundancia, libremente. De hecho, la libertad misma consiste en elegir libremente un proyecto a construir, entre todas las posibilidades existentes, conociendo del tema todo lo posible,
está unida fuertemente a la responsabilidad

El hombre es un animal curioso cuando está sano, biológicamente es como un niño, cabezón, con poco hocico, poco pelo, con mucha energía para jugar, para crear. Por lo mismo, un hombre necesita proyectos para realizar, porque realizar es lo que lo hace sentirse útil. Un hombre se realiza cuando su proyecto de vida corresponde a lo que quiere realizar.

Cuando nos referimos a un hombre (humano, macho o hembra) de esta categoría, vemos que un hombre realizado corresponde a un hombre psicológicamente maduro, responsable y libre a la vez. Porque la libertad no es posible sin responsabilidad, porque la responsabilidad te la da el saber hacer algo bien: habilidad de responder = habilidad de hacerte cargo = habilidad de hacer.
Sin responsabilidad no se puede realizar nada, o las cosas no se terminan o se realizan mal y se echan a perder.

La inmadurez es otra enfermedad.